[Ceares 2-2 Urraca] Con Iglesias hemos topado
Dos goles del ariete gijonés impiden la victoria del Ceares, en un partido en el que por dos ocasiones tuvieron la victoria enfocada los teyeros.
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Se llegaba con ganas al partido de la tarde del sábado. El encuentro entre semana frente al Universidad dejaba un sabor demasiado amargo. A pesar del empate, y del desarrollo, nadie se esperaba un desenlace así.
Ceares 2 – 2 Urraca
Ceares: Kike; Fonso, Lozano, Beni, Chery; Aitor, Juan Carlos; Pablo Martínez (Bryan 38′), Jimmy, Cris (Polo 62′) y Ponte
Urraca: Ricardo; Félix, Pelayo, Toyos, Edu, Iván (Pablo Díaz 85′), Rony, Cuanda (Ramonín 46′), Riki, Jorgito y Marcos Iglesias
Goles:
1-0: Jimmy 15′
1-1: Marcos Iglesias 20′ (P)
2-1: Aitor Cañedo 35′
2-2: Marcos Iglesias 65′
Árbitro: Cano Fernández (Nalón). Amonestó por el Ceares a Beni y Lozano y por el Urraca a Toyos, Riki y Rony. Expulsó a Adrián, segundo entrenador del Ceares.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la jornada trigésimo primera de la Tercera División de Asturias celebrado en La Cruz. Medio millar de espectadores, con nutrida presencia de la afición visitante. Terreno de juego un poco blando. En los prolegómenos se guardó un minuto de silencio por el trágico accidente de avión en Francia y por la muerte del tío de Lozano.
El Urraca transita tranquilamente por el Segundo Grupo de Tercera División. A pesar del gran equipo montado, ni frío ni calor en la clasificación para el equipo llanisco, del que se esperaba fuera uno de los grandes candidatos a ocupar plaza de Play-Off.
Arrancaba fuerte el Ceares. Cris Alonso, que sería una pesadilla para la defensa visitante durante los primeros 45 minutos, cabalgaba a sus anchas. Apenas había dado comienzo el encuentro, y se encontraba frente al portero, cedía a Ponte, pero no llegaba al balón cuando sólo era preciso empujarla.
Al cuarto de hora, gran balón en largo, controla con el muslo, centra con la izquierda, y Jimmy, que llegaba al segundo palo, fusila por bajo. Gran jugada, gran gol, y grandes minutos teyeros.
Pero se llegó a la tónica habitual. Primera llegada en contra del Ceares, y primer gol. O primer penalti. Sólo cinco minutos después de adelantarse en el marcador, Marcos Iglesias transformaba una pena máxima cometida por Beni.
Esos minutos, entre el gol del Urraca, y el segundo del Ceares, fueron los más desconcertantes. Sin un dueño claro, el partido se volvía soso, como ante una tregua. La rompía Aitor Cañedo, en un partido redondo por su parte, al rematar a la perfección un córner ejecutado desde banda izquierda.
Pese a la lesión de Pablo Martínez, sustituido por Bryan, el gol de Aitor dio paso a los mejores minutos locales. Primero Cris superaba al portero visitante, recortaba a su par, y su disparo sin portero era rechazado. En el córner, lo intentó Juan Carlos con gol olímpico, pero despejaba Ricardo a córner de nuevo.
Córner que el árbitro no vio necesario ejecutar, ante el asombro bricker. Quince minutos para descansar, quince minutos para replantear.
En la segunda mitad, el Urraca, por detrás en el marcador, decidió liarse la manta a la cabeza en busca del empate. Lo hacía sin ocasiones, más por obligación que por devoción, sólo dominando la posesión.
El Ceares cedió el balón. Eran los visitantes quienes se veían obligados a buscar el empate. No importaba que dominaran ellos, era su obligación.
La dinámica la rompió de nuevo Marcos Iglesias. El delantero remataba de cabeza un centro desde banda izquierda y subía el empate al marcador. La celebración, tan ridícula como innecesaria, encendía un poco los ánimos.
De ahí al final, ambos equipos nadaban sin perder la ropa de vista. Nadie quería perder, y daba la sensación de que nadie podía ganar.
La tuvo Polo, la última del partido. Gran jugada, casi penalti, pero no podía finalizar. La jugada lo merecía, y el Ceares también.
Al final empate. Lástima de primera parte donde casi podrían haber sentenciado. Ahora toca ganar. La oportunidad el Jueves. En Lugones. No faltan ganas.
