Las dimensiones y la superficie del Bayu beneficiaron a los futbolistas más creativos del equipo de Eraña, que por fin logró ganar.

Repetía arriba la pareja que había hecho estragos durante la primera parte de la temporada, Álvaro Ponte y Marcos Iglesias, Marcos Iglesias y Álvaro Ponte, y lo hacen con una victoria en El Bayu que da aire a los visitantes, y se lo resta a los locales.

El campo sierense se adapta a la perfección a la maquinaria teyera. Terreno de juego grande, y superficie artificial. Justo lo que necesitan Pablo Martínez y César para combinar entre ellos y hacer rodar el balón. Por bandas, Natan y Cris buscan la verticalidad y los centros para la pareja de arietes.

La primera parte tuvo claro color celeste, color que lucían ayer los del Parque de los Pericones. Mucho dominio de balón, posesión, y control del juego. Enfrente, los locales, optaron por el juego vertical buscando a Saha, pero se encontró con un impecable Aitor Cañedo en el marcaje, que consiguió minimizar los daños que el espigado delantero africano suele causar en las zagas.

La primera ocasión llegó en un disparo de César desde dentro del área, pero le salió muy centrado y atrapaba Kike, viejo conocido de la portería teyera. El otro conocido, y añorado, es Borja Argüelles, luciendo su clásico 7 en la camiseta. En la siguiente jugada llegaba el gol, al marcar Marcos Iglesias un claro penalti cometido sobre él mismo. El disparo, duro y abajo, imparable.

La segunda mitad se disputó a “tumbabierta”. Los brickers buscaron el gol con rápidas transiciones, con un Cris Alonso que desquició a la defensa local. En su primera internada era rechazado el centro por bajo.

La primera clara fue para Marcos Iglesias, que se encontró un balón muerto en el área, solo. Controló, y cruzó el balón, pero le pegó algo mordido y se perdió por centímetros. Ponte tuvo la segunda, tras dejada de Marcos de cabeza, pero no conseguía batir a Kike en su mano a mano.

Davo salvaba al Ceares en un doble remate de Saha, en los minutos en que más empujó el Siero, aunque lo hicieran siempre con la misma fórmula, balón vertical buscando la cabeza de Saha y la segunda jugada.

Muy clara también para Marcos Iglesias. Robaba el balón en posición del lateral zurdo, se internaba en el área, encaraba a Kike, ponía pausa, pero inesperadamente disparaba al lateral zurdo cuando se cantaba el gol. Además, en la misma jugada el 9 gijonés caía lesionado, y era sustituido por Chus Naves.

Jugada clave sólo 5 minutos después, cuando los locales reclamaban un penalti con vehemencia, lo que llevó a la expulsión de Herrero por protestar. Quedan menos de 20 minutos, pero el Siero quedaba muy tocado.

Tampoco le perdieron la cara al partido, y pese a su inferioridad numérica no entregaron el partido. No ayudaba el Ceares, que no terminaba de sentenciar. Un mal disparo de Álvaro Ponte tras dejada de Cris, y sobre todo, una gran jugada del extremo gijonés, que lo plantaba ante Kike, pero salvaba de nuevo el guardameta local.

Esa jugada llegaba en el minuto 95. Parecía todo el pescado vendido. Pero otro balón colgado terminaba en el segundo palo. El remate de cabeza se iba a las manos de Davo. Ahora sí, final.

, líder de la categoría, y con una plantilla de muchos kilates, buscará dar otro paso hacia el campeonato. El Ceares, dar otro para su objetivo, la Copa Federación.